Es soneto nombre que me espanta,
en otros tiempos, digno de la gloria,
hacerme uno pienso con euforia,
a ver si mi moral así levanta.
El motivo hay que buscar si no lo tienes,
y a la musa consultar de once a doce,
porque dejarlo en manos de este goce,
parece cosa fácil y entretiene.
¿A un niño? ¿al mar? ¿a las virtudes?
todo está hecho, y con más gracia,
sólo quiero tener similitudes,
con los grandes poetas, ya en desgracia,
y rimar mis versillos, si no acudes,
inspirándome allí, en la aristocracia.